30 marzo 2011
26 marzo 2011
Tabaco. Neumólogos recuerdan que los cigarrillos también tienen radiación
Fuente:http://www.diariosigloxxi.com/texto-s/mostrar/17646/tabaco-neumlogos-recuerdan-que-los-cigarrillos-tambin-tienen-radiacin
- Exigen que las tabaqueras informen de "la composición exacta" de sus productos.
MADRID, 25 (SERVIMEDIA)
Los más de 200 especialistas españoles, portugueses y latinoamericanos reunidos estos días en la Línea de la Concepción (Cádiz) han pedido mayor presión legislativa para que las tabaqueras informen de "la composición exacta" de los cigarrillos, que, recuerdan, también tienen sustancias radiactivas como el polonio.
Estos profesionales, que se han dado cita en el XXVII Congreso Neumosur, quieren que las tabaqueras informen, "particularmente", de las sustancias añadidas de forma artificial a los cigarrillos para modificar sus propiedades.
Y es que, han asegurado este viernes, las sustancias añadidas al tabaco están protegidas como secreto industrial, "a pesar de los descubrimientos realizados hasta la fecha, que han permitido conocer que hoy los cigarrillos tienen ya más de droga de diseño que de tabaco".
Desde esta perspectiva, las sociedades científicas latinoamericana (Alat), portuguesa (SPP) y del sur de España (Neumosur), lamentan que tanto en países desarrollados, como en otros en vías de desarrollo, aún no exista un control legislativo efectivo de una sustancia que causa la muerte a más de la mitad de los que la consumen en sus dosis habituales.
Por eso, consideran "absolutamente necesario" que todo el proceso de fabricación de los cigarrillos, incluida la fase final conocida como "salseado", en la que se matizan las propiedades aromáticas y gustativas, sea completamente transparente para el público y para las autoridades sanitarias.
En la misma línea, los neumólogos subrayan que la presencia de sustancias radioactivas como el Polonio (Po), "cuya radiación ejerce un importante efecto sinérgico con otros carcinógenos químicos del tabaco", incrementan significativamente el riesgo de padecer cáncer de pulmón a lo largo de la vida.
A este respecto, finalizan las sociedades médicas, un estudio reciente realizado en Estados Unidos, ha concluido que la dosis radiactiva recibida por la población fumadora es 36 veces superior a la suma de la recibida por los trabajadores de todas las centrales nucleares de este país y a los de todas las instalaciones militares que utilizan energía nuclear.
22 marzo 2011
Una política saludable
Fuente: http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/cash/17-5035-2011-03-21.html
El acuerdo implica un compromiso recíproco: el Gobierno no aumenta las tasas impositivas y las compañías se obligan a ingresar un determinado monto. Elevar el tributo desalentaría el consumo.
La mayoría de los sistemas tributarios del mundo incluye algún gravamen especial sobre los cigarrillos. Este tipo de impuesto persigue, además de la clásica finalidad fiscal, el objetivo de elevar el precio del producto para desincentivar su consumo. Un estudio del Banco Mundial estima que un incremento del diez por ciento en el valor de los cigarrillos evita la muerte de entre cinco y quince millones de personas en el mundo. En la Argentina ya desde las primeras décadas del siglo XX se aplicaron distintos tipos de impuestos internos al tabaco. En la actualidad, el Gobierno y las tabacaleras acordaron la fijación de metas bianuales de recaudación. El acuerdo implica un compromiso recíproco: el Gobierno no aumenta las tasas impositivas y las compañías se obligan a ingresar un determinado monto. Si la liquidación del tributo arroja una cifra inferior a la comprometida, las tabacaleras aportan la diferencia. En cambio, el excedente se traslada al ejercicio fiscal siguiente si el ingreso de fondos fue superior a la meta.
La Argentina suscribió el Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco durante la celebración de la 56ª Asamblea Mundial de la Salud realizada en mayo de 2003. Ese tratado incluye la prohibición de toda forma de publicidad, promoción y patrocinio de productos asociados al tabaco, la protección contra la exposición al humo de tabaco ajeno y el aumento del precio y de los impuestos al tabaco. El Convenio promueve también que la actividad tabacalera sea sustituida por alternativas económicamente viables para los trabajadores y cultivadores.
Ese convenio aún no fue ratificado legislativamente por la oposición de la mayoría de los representantes de las siete provincias tabacaleras (Catamarca, Chaco, Corrientes, Jujuy, Misiones, Tucumán y Salta). Esa dirigencia política advierte la imposibilidad de sustituir la actividad tabacalera y también señala que más del 80 por ciento de la producción se exporta.
Martín González Rosada, del blog Foco Económico, estima que la recaudación sobre el consumo de cigarrillos podría haberse duplicado, en relación con los 7600 millones de pesos establecidos en el convenio vigente, con una suba de la presión impositiva del 68 al 87 por ciento. Para justificar su posición, las compañías señalan que un incremento impositivo perjudica a los consumidores porque se traslada totalmente a los precios.
Las tabacaleras sostienen también que esto resulta contraproducente para el Estado Nacional, ya que el fisco recaudaría menos a causa del aumento del contrabando. González Rosada sostiene que “se debe considerar que hay dos tipos de contrabando. El denominado minorista o contrabando hormiga, que es el que potencialmente está favorecido por el diferencial de precios con los países vecinos, y el contrabando mayorista, llevado a cabo por organizaciones ilegales que se realiza a través de contenedores, camiones y aviones y que elude la carga impositiva. Tradicionalmente la industria tabacalera hace énfasis en el primer tipo de contrabando, sin embargo la evidencia empírica sugiere que el contrabando minorista es muy pequeño comparado con el mayorista y las medidas fiscales como los aumentos impositivos sobre el consumo de tabaco no lo afectan”. Rosada concluye que “está claro que renovar el convenio de recaudación con metas artificialmente bajas es beneficioso para las tabacaleras, pero es muy perjudicial para la población y para el Estado. El Gobierno debe incrementar los impuestos al consumo de cigarrillos para disminuir el consumo con el consiguiente beneficio sobre la salud de los fumadores y no fumadores. Así bajarían los costos directos e indirectos de la atención médica de las enfermedades atribuibles al consumo de tabaco y se incrementaría la recaudación fiscal, lo que se dice, una política fiscal saludable”
drubinzal@yahoo.com.ar
El acuerdo implica un compromiso recíproco: el Gobierno no aumenta las tasas impositivas y las compañías se obligan a ingresar un determinado monto. Elevar el tributo desalentaría el consumo.
La mayoría de los sistemas tributarios del mundo incluye algún gravamen especial sobre los cigarrillos. Este tipo de impuesto persigue, además de la clásica finalidad fiscal, el objetivo de elevar el precio del producto para desincentivar su consumo. Un estudio del Banco Mundial estima que un incremento del diez por ciento en el valor de los cigarrillos evita la muerte de entre cinco y quince millones de personas en el mundo. En la Argentina ya desde las primeras décadas del siglo XX se aplicaron distintos tipos de impuestos internos al tabaco. En la actualidad, el Gobierno y las tabacaleras acordaron la fijación de metas bianuales de recaudación. El acuerdo implica un compromiso recíproco: el Gobierno no aumenta las tasas impositivas y las compañías se obligan a ingresar un determinado monto. Si la liquidación del tributo arroja una cifra inferior a la comprometida, las tabacaleras aportan la diferencia. En cambio, el excedente se traslada al ejercicio fiscal siguiente si el ingreso de fondos fue superior a la meta.
La Argentina suscribió el Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco durante la celebración de la 56ª Asamblea Mundial de la Salud realizada en mayo de 2003. Ese tratado incluye la prohibición de toda forma de publicidad, promoción y patrocinio de productos asociados al tabaco, la protección contra la exposición al humo de tabaco ajeno y el aumento del precio y de los impuestos al tabaco. El Convenio promueve también que la actividad tabacalera sea sustituida por alternativas económicamente viables para los trabajadores y cultivadores.
Ese convenio aún no fue ratificado legislativamente por la oposición de la mayoría de los representantes de las siete provincias tabacaleras (Catamarca, Chaco, Corrientes, Jujuy, Misiones, Tucumán y Salta). Esa dirigencia política advierte la imposibilidad de sustituir la actividad tabacalera y también señala que más del 80 por ciento de la producción se exporta.
Martín González Rosada, del blog Foco Económico, estima que la recaudación sobre el consumo de cigarrillos podría haberse duplicado, en relación con los 7600 millones de pesos establecidos en el convenio vigente, con una suba de la presión impositiva del 68 al 87 por ciento. Para justificar su posición, las compañías señalan que un incremento impositivo perjudica a los consumidores porque se traslada totalmente a los precios.
Las tabacaleras sostienen también que esto resulta contraproducente para el Estado Nacional, ya que el fisco recaudaría menos a causa del aumento del contrabando. González Rosada sostiene que “se debe considerar que hay dos tipos de contrabando. El denominado minorista o contrabando hormiga, que es el que potencialmente está favorecido por el diferencial de precios con los países vecinos, y el contrabando mayorista, llevado a cabo por organizaciones ilegales que se realiza a través de contenedores, camiones y aviones y que elude la carga impositiva. Tradicionalmente la industria tabacalera hace énfasis en el primer tipo de contrabando, sin embargo la evidencia empírica sugiere que el contrabando minorista es muy pequeño comparado con el mayorista y las medidas fiscales como los aumentos impositivos sobre el consumo de tabaco no lo afectan”. Rosada concluye que “está claro que renovar el convenio de recaudación con metas artificialmente bajas es beneficioso para las tabacaleras, pero es muy perjudicial para la población y para el Estado. El Gobierno debe incrementar los impuestos al consumo de cigarrillos para disminuir el consumo con el consiguiente beneficio sobre la salud de los fumadores y no fumadores. Así bajarían los costos directos e indirectos de la atención médica de las enfermedades atribuibles al consumo de tabaco y se incrementaría la recaudación fiscal, lo que se dice, una política fiscal saludable”
drubinzal@yahoo.com.ar
AUMENTAN MUERTES POR CANCER DE PULMON EN MUJERES
Fuente: http://www.ansa.it/ansalatina/notizie/notiziari/argentina/20110321215935236324.html
BUENOS AIRES, 21 (ANSA)- La mortalidad femenina por cáncer de pulmón, enfermedad atribuible al tabaco, aumentó en Argentina 1,7 por ciento anual, entre 1980 y 2008, a diferencia de los índices entre los hombres, que se redujo en igual período 2 por ciento, informó una entidad de profesionales. "El consumo de tabaco ha aumentado en las últimas décadas en las mujeres argentinas, empeorando los factores de riesgo de las enfermedades crónicas no transmisibles como el cáncer, las enfermedades respiratorias, la diabetes y las enfermedades cardiovasculares", detalló la Fundación Interamericana del Corazón en Argentina.
Según datos del Ministerio de Salud, 28,6% de las mujeres de entre 18 y 64 años fuma y se verificó una disminución en la edad de inicio del consumo de tabaco en las mujeres y un mayor consumo entre las adolescentes de entre 13 y 15 años que entre los varones: 27,3% ellas, 21,1% ellos. Para Mariela Alderete, vicedirectora de la Fundación Interamericana del Corazón Argentina, "es necesario que se implemente de manera urgente una política sanitaria a nivel federal que busque reducir el consumo de tabaco y la exposición al humo de tabaco". Alderete recordó que incluso el tema fue presentado por el Comité de las Naciones Unidas para la Eliminación de toda forma de Discriminación hacia las Mujeres, en sus recomendaciones del año pasado para Argentina.
04 marzo 2011
Rio Gallegos: Conforman el CAI mientras que el municipio promueve más controles
Fuente: http://www.prensalibreonline.com.ar/dblog/noticia.asp?id=15135
Antonio Águila es uno de los ediles que integran el Comité Asesor Interdisciplinario (CAI) en representación del Concejo Deliberante, en tanto que Salud Pública y Desarrollo Comunitario son los organismos que actuarán como autoridades de aplicación de la norma que prohíbe fumar en los espacios públicos.
El concejal Antonio Águila (UCR) es uno de los representantes del Concejo Deliberante en el Comité Asesor Interdisciplinario.
El CAI actuará como órgano consultivo para la reglamentación de la ordenanza Nº 7172/10 que establece la prohibición de fumar en espacios cerrados públicos y privados de acceso público. El Comité deberá elaborar ahora un programa anual de actividades en función del cumplimiento de los objetivos de la norma.
La ordenanza antitabaco prevé (artículo 5) la conformación del CAI, que “será integrado por un miembro del Comité Antitabaco que funciona en el Hospital Regional Río Gallegos, uno del Colegio Médico, otro por la Dirección de Salud Pública municipal y dos ediles”.
Águila es uno de los representantes del cuerpo deliberativo en el Comité Asesor Interdisciplinario que comenzó a funcionar ayer. En esta primera reunión se analizaron aspectos relativos a la reglamentación de la ordenanza y a la elaboración de un “Programa anual de actividades” que, según lo establece la norma, debe realizar este Comité.
Uno de los puntos destacados por el edil fue la necesidad de promover amplias campañas de difusión por los medios masivos de comunicación sobre los alcances de la norma. Por este motivo, se citará para la próxima reunión al Secretario de Gobierno de la Municipalidad para coordinar la elaboración de las mismas.
Intensifican los controles
Por otro lado, cabe resaltar que inspectores de Bromatología, dependientes de la Dirección de Salud Pública, son los encargados de controlar que no se fume en espacios públicos cerrados y privados de acceso público y día a día intensifican este trabajo.
Esta decisión surgió luego de una reunión mantenida días atrás entre Águila, la doctora Norma Gallardo (Salud Pública) y el profesor Alberto Lozano (Desarrollo Comunitario), estos dos últimos en su carácter de autoridades de aplicación, quienes con los agentes de Bromatología, realizarán además los controles en los comercios, entre ellos quioscos, confiterías y restaurantes.
Mientras tanto, desde el Comité Antitabaco, la especialista en neumonología, Mirta Castro, señaló que se trabajará para “ayudar a los fumadores mediante un programa de ayudas y la creación de centros de atención, en la búsqueda de lograr que Río Gallegos se convierta en una ciudad totalmente libre de humo”.
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